El panameño Gabriel ‘Gavilán’ Gómez estuvo presente en cancha.

Con piedras, trozos de concreto y a puñetazos, aficionados de Cartaginés y Herediano protagonizaron anoche un pleito que condujo a  la suspensión del encuentro.

Al finalizar el primer tiempo, un  grupo de fanáticos brumosos corrió hacia donde estaban ubicados los seguidores rojiamarillos y a partir de ahí, se desató el caos en el sector sur del Estadio José Rafael Fello Meza.

El intercambio de golpes, patadas, empujones y agresiones   no cesó hasta que los  efectivos de la Seguridad Privada intervinieron para apaciguar los ánimos. Sin embargo, cuando lo  hicieron, el pleito ya había dejado a varias personas heridas.

 Al ocurrir la trifulca, los jugadores ya estaban en los camerinos, sitio del que no saldrían más, ya que las autoridades de Unafut decidieron suspender el partido al aducir que no había garantía de seguridad para continuar con el duelo.

Luis Peraza, director de la Unafut, afirmó que el equipo blanquiazul no tenía aprobado el plan de seguridad.
Lo mismo  manifestó Milton Alvarado, comandante regional de la Fuerza Pública de Cartago.

“El plan  no fue aprobado por nosotros; ellos llevaron a cabo el evento sin haber cumplido los requisitos mínimos y el plan de seguridad que necesitamos. Con lo que sucedió, lo que indicamos es suspender el evento porque no se cumplen las condiciones mínimas”, expresó.

Luis Fernando Vargas, presidente del Cartaginés, responsabilizó a un grupo de aficionados blanquiazules de iniciar el pleito que acabó de forma prematura con el choque.  “Fue evidente lo que sucedió, y ante lo evidente no podemos llegar y negar la realidad de las cosas. Todos los que estábamos en el estadio vimos que unos pocos aficionados del Cartaginés se saltaron una malla y fueron a provocar a los aficionados de Herediano”, dijo Vargas.

Por su parte, Orlando Moreira, vicepresidente de Fuerza Rojiamarilla, eximió de culpa a los seguidores del Team.

«Yo tengo que decirlo: la barra del Herediano estaba tranquila en este costado y ellos se tomaron la molestia de pasar de un lado al otro del estadio para agredirlos”, denunció el dirigente.

Moreira aseguró que las broncas en los estadios ya cansan.

“Lo ideal es que uno venga al estadio a apoyar, a ver a su equipo. Que canten, que griten, que brinquen, pero eso ya es majadería. Ya es mucho y no solo aquí en Cartago, sino en la mayoría de estadios que hay barras organizadas, siempre son los mismos”.

 

La Nación.