El Real Madrid dominó por completo la final y venció con comodidad al Manchester United por 2 a 1 para quedarse con la Supercopa de Europa, por segunda vez consecutiva.

El primer tiempo fue un monólogo del conjunto español, que solo sufrió en alguna contra de su par inglés. El primer gol llegó gracias a un pase fantástico de Carvajal desde 3/4 de cancha para Casemiro, quien corrió solo en diagonal, capturó la pelota dentro del área y de primera pateó con su pierna izquierda al segundo palo.

Desde allí se acentuó la tendencia de dominio y los de Zinedine Zidane se adueñaron de la posesión y de las situaciones. Sin embargo, el segundo tanto tardó en llegar.

Recién en el segundo tiempo, el Madrid pudo ampliar la diferencia. Isco tiró una pared con Gareth Bale que desarmó a la defensa del United y con un remate esquinado estampó el 2 a 0.

Las situaciones en favor de los campeones de la Champions League se empezaron a acumular y parecía cuestión de tiempo para que el arco defendido por David de Gea, de aceptable actuación, sufriera el tercero.

Sin embargo, en una jugada aislada, los británicos consiguieron el descuento. Nemanja Matic probó de media distancia y Keylor Navas dio un infantil rebote al medio que Romeleu Lukaku, en su debut, cambió por gol.

A partir del gol, el trámite del partido se emparejó. Los de José Mourinho fueron en busca del empate con más ganas que fútbol y tuvieron el empate a falta de 10 minutos en un mano a mano que Navas le tapó a Marcus Rashford.

Más allá de los esfuerzos, la falta de trabajo se notó en el elenco inglés que careció de juego asociado y no pudo llegar a la igualdad en el marcador. El Real Madrid aguantó los minutos finales y tras 7 minutos de adición pudo festejar el título.

Esta es la cuarta Supercopa que conquista el conjunto blanco, la segunda de manera consecutiva. Además, es el quinto título de Zidane como entrenador del Real Madrid.

 

Vía Infobae