A la Liga de España le quedan dos jornadas y la lucha entre Barcelona y Real Madrid por el título continúa. En el Camp Nou, el equipo de Luis Enrique venció 4-1 a Villarreal y sumó su quinto triunfo consecutivo, entre los que marcó 20 goles. Fue una tarde perfecta para el tridente de Barcelona y soñada para Lionel Messi, quien festejó con dos goles la decisión de la FIFA de levantarle la sanción con la Selección. Además, el conjunto catalán, que acumula 84 puntos, le metió presión a Real Madrid, que -aunque todavía tiene un partido pendiente frente al Celta de Eduardo Berizzo (se disputará el 17 de mayo)- a las 15.45 visita al descendido Granada.
El primer tiempo no hacía pensar el partido que se daría en el Camp Nou. El duelo comenzó sin emociones e incluso con un Villarreal bien plantado que lograba evitar que el tridente del Barsa pudiera acercarse con peligro en el primer cuarto de hora. Fue esa la ventaja que le dio Barcelona, hasta que apretó las tuercas e hizo funcionar su maquinaria ofensiva.
A los 20 minutos, de tiro libre, Messi buscó el gol pero fue a los 21 cuando se rompió el cero. De contra, Suárez manejó los hilos y entró por el sector derecho. Rápido de reflejos, el uruguayo metió el cambio de frente para Leo, que intentó cruzar de zurda pero la pelota dio en un rival y le quedó a Neymar, quien solo ante el arquero Andrés no falló.
Pero el equipo de Luis Enrique no pudo mantener por mucho tiempo la ventaja. A los 32 minutos, Soldado aprovechó el hueco en la banda derecha y habilitó a Bakambu, quien a la carrera dejó en el camino a Piqué en carrera y definió con calidad frente a Ter Stegen.
Aunque el gol animó a la visita, Barcelona cuenta con un jugador como ningún otro. Lionel Messi frotó la lámpara en la última jugada del primer tiempo, dejó un rival en el camino y sacó un fuerte zurdazo cruzado antes de meterse al área que, luego de rozar en un jugador de Villarreal, se metió pegado al segundo palo.
Faltaba un invitado a la fiesta de Barcelona. Desde el arranque del complemento, el tridente se empeñó en que Luis Suárez también convirtiera su gol. Y, finalmente, el uruguayo consiguió su tanto cuando, a los 24 minutos, fue habilitado por Sergi Roberto, eludió a Álvaro y ajustició a Andrés.
Con el tridente en esplendor, luego de volver a marcar en la Liga desde el 1 de marzo, cuando Messi, Suárez y Neymar le convirtieron al Sporting, Barcelona sacó a Villarreal de la cancha. Con menos de diez minutos por delante, Neymar armó la jugada y Suárez consiguió un penal. El encargo de la falta fue el rosarino, quien con la mirada firme en el arco definió picando la pelota. Aplausos y regocijo en las tribunas del Camp Nou.
Vía Clarín