Russell Westbrook y Damian Lillard están protagonizando uno de esos duelos que se recordará durante años y que hace más grandes aún a los playoffs. Hasta ahora el claro ganador era el de Portland, pero con la llegada de la eliminatoria a Oklahoma su par se ha crecido, siendo el gran culpable de la primera victoria de los suyos.
El pique entre los dos ya es público y lo dejan ver siempre que pueden durante los partidos. El otro día Lillard celebró como loco un fallo desde el triple de Westbrook en el que ni siquiera se empleó en defenderle para, en la jugada siguiente, meterle uno en la cara desde 9 metros. Este sábado, un Westbrook extramotivado celebró varias canastas sobre Lillard haciendo el gesto de mecer un bebé, dando a entender que es demasiado pequeño para él.
No sabemos hasta dónde llegarán las hostilidades gestuales, pero de momento lo que nos está dejando este enfrentamiento es un nivel de baloncesto tremendo. El gato al agua se lo llevó el de los Thunder, que después del segundo partido fue muy crítico consigo mismo pero que también se mostró confiado en que iba a remontar la situación con ayuda de sus compañeros. No se equivocó. Por primera vez en la serie los Thunder parecieron mejores en el segundo tiempo de un partido. Y eso a pesar de la explosión de Lillard en el tercer cuarto, cuando metió 25 puntos. El último en hacer algo así en un cuarto de un partido de playoffs fue Allen Iverson en 2001.
Ese repentino estallido de juego del base de los Blazers fue lo que tiró por tierra el partido de los Thunder en el segundo enfrentamiento y este sábado amenazaba con pasar lo mismo. Pero esta vez los locales se mostraron mucho más seguros de sí mismo, sobrevivieron al tiroteo de Lillard y resolvieron en el último cuarto de la mano de Westbrook, el mejor de los suyos. El base jugó uno de los mejores partidos de la temporada y se le vio especialmente acertado. Metió la mitad de sus lanzamientos, el 66,7% de los triples y sólo falló un tiro libre. Acabó con 33 puntos, 5 rebotes y 11 asistencias. Con un Westbrook así los Thunder son otros.
Pero es que además estuvo bien secundado por Paul George (22+6+6), Gerami Grant (18) y Dennis Schroder (17+5+6+2). Así que esta vez los 32 puntos, 4 rebotes, 6 asistencias y 2 robos de Lillard no sirvieron más que para acabar con una bonita estadística. La eliminatoria está que arde. De momento, junto con el Nuggets-Spurs, la más bonita de ver, la más emocionante y la que tiene un final más incierto. En la madrugada del domingo al lunes, cuarto asalto del Thunder-Blazers. Cuarto asalto del Westbrook-Lillard.
Redacción JM Deportes