Gennady Golovkin (49-1-1, 35 KOs) regresó al Madison Square Garden de Nueva York este sábado y reconquistó la corona de peso mediano de la Federación Internacional de Boxeo al vencer a un valiente Sergiy Derevyanchenko (13-2, 10 KOs) en un combate por las coronas vacantes de la FIB y Organización Internacional de Boxeo. Los jueces entregaron tarjetas de 115-112, 115-112, 114-113 a favor de Golovkin tras los 12 asaltos.
Golovkin derribó a su rival en el primer asalto y lo cortó en el segundo episodio, resultando en una fuerte hemorragia en la ceja derecha, algo que provocó que el ucraniano presionará más y atacará más al cuerpo. Golovkin se vio vulnerable en muchas ocasiones cuando fue castigado en el quinto y décimo asalto.
Fue la segunda pelea con su entrenador Johnathon Banks en su esquina. Banks ha dicho que ha mejorado la técnica y el volumen de golpes que lanza el kazajo, aunque fue el ucraniano el que lanzó el mayor número de golpes y golpes de poder.
“No fue una buena noche para mí. Tengo que enfocarme más, fue buena experiencia para mí», declaró Golovkin, quien fue abucheado por la afición tras la decisión.