El Director Técnico del Tauro FC, Felipe Baloy, se disculpó mediante sus redes sociales luego de los conflictos dados en los últimos minutos del partido de la gran final del Torneo Clausura de la Liga Panameña de Fútbol.
Estas fueron las palabras de disculpas de Baloy:
Estoy enteramente agradecido con las oportunidades que la vida me ha brindado, y orgulloso de haber tenido la capacidad de aprovecharlas, transitarlas y sobretodo de haber aprendido de cada victoria y cada derrota que a lo largo de mi carrera he tenido, porque a pesar de ser profesional, esto no es garantía de perfección, cada día trabajo con el animo de construir un legado, principalmente en mi familia y cuando es posible en aquellos que han seguido mi carrera y anhelan algún día lograr algunas cosas de las con con mucho trabajo y sacrificio he logrado, pero no siempre todo es perfecto, como seres humanos en contadas ocasiones cometemos errores, unos que te dejan en el ojo del huracán y otros que muchas veces pasan desapercibidos, pero siempre debemos tener un corazón humilde y en paz para reconocerlo y saber el momento indicado para aceptarlo, no solo por mi, sino por muchos que se esfuerzan para vivir de una pasión como lo es el fútbol, mi principal objetivo es que todos los jóvenes entiendan que los sueños se persiguen trabajando, intentando, capacitandose, preparándose física y sobretodo mentalmente para saber afrontar las situaciones que se puedan presentar de una manera adecuada.
Hoy quiero disculparme con todos aquellos que me han apoyado desde el día uno, esos que a pesar de mis desaciertos han estado ahí, con los chicos y chicas que un día han pensando en ser futbolistas y anhelan vestir la camisa de Panama; amar un deporte no siempre es fácil, No se trata de no saber perder, se trata de la impotencia que se siente cuando aún dándolo todo en cada partido, algunas decisiones externas no son las justas, así en el fútbol como en la vida, manejar la frustración y el enojo es fundamental y esto de seguro es algo en lo que seguiré trabajando.
¡Gracias a todos por creer!
Por: Briana Sánchez