El ex futobolita alemán Philipp Lahm, quien fue campeón del mundo en Brasil 2014, y la modelo rusa Natalia Vodianova serán los encargados de llevar el trofeo de la Copa del Mundo al estadio Luzhniki, minutos antes del comienzo de la final entre Francia y Croacia el próximo 15 de julio.
La Copa del Mundo, que será trasladada dentro de un maletín diseñado y fabricado por la empresa francesa Louis Vuitton, tiene una altura de 36 centímetros, un peso de 6.17 kilogramos y está hecha de oro macizo de 18 quilates con una base de malaquita semipreciosa.
«La gente en Rusia ha estado muy emocionada de ser los anfitriones de la Copa del Mundo de la FIFA. Estoy muy orgullosa de representar a mi país ese día y del sueño que representa el trofeo original del Mundial», dijo Vodianova.
Louis Vuitton, además de fabricar el maletín para trasladar el trofeo, subastará un baúl con 13 balones históricos utilizados en algunas ediciones pasadas de la Copa del Mundo, los cuales fueron reeditados por la compañía Adidas y que están firmados por estrellas de los equipos campeones de esos mundiales.
Lo recaudado por la subasta, que se realizará tres días antes de la final, será a beneficio de Naked Heart Foundation, organismo que ayuda a niños con necesidades especiales.
Uno de los balones que subastará Louis Vuitton es el Azteca, utilizado en el Mundial de México 1986 y está firmado por algunas estrellas argentinas como Nery Pumpido, Sergio Batista, Carlos Tapia, Julio Olarticoechea, Oscar Garre y Ricardo Guisti, quienes fueron los campeones con la albiceleste ese año.
Otro de los balones es el Tricolore, utilizado en Francia 1998 y que está firmado por algunos campeones franceses como Zinedine Zidane, Lilian Thuram y Fabien Barthez. También está el Jabulani, que se usó en Suráfrica 2010, y que está firmado por los españoles Iker Casillas y Carles Puyol.
Vía: EL NACIONAL