Saprissa sufrió en casa, pero no solo por la derrota. Las pesadillas del equipo morado fueron más allá de una nueva caída.
También perdieron a Juan Bustos Golobio por lesión y David Ramírez salió expulsado.
Pérez Zeledón fue el culpable de la segunda pérdida tibaseña. La gran sorpresa del torneo ratificó que no por casualidad es el líder, ahora con 13 unidades.
Antes del cotejo, parecía que el día podía ser bueno para los morados, pues recuperaron a jugadores importantes.
Watson alineó a los seleccionados Ramírez y Daniel Colindres, quienes llegaron al país el miércoles luego de jugar con la Selección Nacional. También regresó David Guzmán, tras su lesión, y por fin tuvo su debut el trinitense Aubrey David.
El caribeño no desentonó, cumplió en su primer juego y por poco anota en el minuto 70.
La afición aprobó su fútbol con aplausos durante el juego.
Sin embargo, esas incorporaciones en el once fueron insuficientes para volver al triunfo.
En la primera parte, los tibaños no lograron crear mayor peligro, trataron de presionar a su rival, pero fallaron cuando querían aproximarse al área generaleña.
Por su parte, Pérez aprovechó el momento para ser efectivo con un tiro libre cobrado de forma impecable por Erick Marín en el 32’.
En el medio tiempo, Saprissa trató de mejorar la posesión del balón y la conexión con sus delanteros, por lo que ingresó Golobio, quien estuvo relegado en la grada en dos cotejos por no renovar.
Mas la apuesta no le resultó al técnico morado, porque solo 10 minutos después, el volante salió de la cancha lesionado y podría tener una fractura de peroné.
En el 87’, Ramírez vio la segunda roja de la semana (el martes lo expulsaron con la Sele).
La desesperación se adueñó de la S y aunque tuvo la paridad en los pies de Diego Calvo, este definió muy mal frente al arco.
Vía: La Nación