Real Madrid puso punto y final a la Liga empatando en el estadio de la Cerámica y ya piensa en la final de la Champions League. El Villarreal fue el primero en avisar en el 3’, tras un mano a mano en el que Enes Ünal no pudo superar al debutante Luca Zidane. Los blancos respondieron con dos disparos de Ramos y Cristiano Ronaldo, en los que tuvo que emplearse a fondo Andrés Fernández.
En la siguiente llegada visitante, superados los diez primeros minutos, se adelantarían los madridistas. Modric entregó el balón a Bale y el galés, con una preciosa maniobra y sin tocar el balón, se deshizo de Bonera para después definir a la perfección con su pierna derecha.
Jugada de ensueño
El Real Madrid dominaba el encuentro y superada la media hora puso distancia en el marcador. La jugada fue para enmarcar. Se inició con una preciosa diagonal de Isco con su pierna izquierda, continuó con un gran control de Marcelo, que se inventó una exquisita asistencia con el exterior, y finalizó con el medido remate de cabeza de Cristiano Ronaldo, ante el que nada pudo hacer Andrés Fernández.
VÍA: REAL MADRID