Comenzó el partido con las dos escuadras estudiándose y apenas algún tímido acercamiento. Parecía que a los locales les costaba creerse que estaban jugando unos cuartos de Champions y ante todo un Bayern, pero a los veinte minutos un centro de Escudero quedó muerto cerca del punto de penalti para la llegada en carrera de Sarabia, quien con todo a su favor la mandó fuera con su pierna mala, la derecha.

El madrileño volvió a avisar con un disparo lejano que sacó bien Ulreich, pero un minuto después, el 32 de la primera, ya no perdonó. Nuevo centro de Escudero por la zurda, Sarabia controla -piden mano los bávaros-. y de zurda bate el marco del Bayern llevando la locura a las gradas. Estaba engrasado el Sevilla, mientras el Bayern se veía obligado a mover piezas por lesión de Vidal, entrando James. Pero el fútbol es un duende cruel y caprichoso, y un centro sin aparente peligro de Ribéry lo desvió con la punta de la bota Jesús Navas hacia su marco, entrando el esférico llorando pese al esfuerzo estéril de David Soria. Tablas en el intermedio.

VÍA: DIARIO SPORT