Para cualquier jugador o jugadora de fútbol, debutar con la camiseta de su selección nacional es un sueño hecho realidad; pero hacerlo ante una potencia mundial en su propia casa, es simplemente una experiencia sin igual.

Este fue el caso de las seleccionadas Schiandra González, Diana Pon, Rosario Vargas y Elidia González.

Estas cuatro jugadoras tuvieron sus primeros minutos vistiendo la camiseta roja de Panamá nada más y nada menos que ante Japón en el Japan National Stadium de Tokio.

El técnico del onceno nacional, Ignacio Quintana, apostó por armar un equipo balanceado en el que incluyó a la gran mayoría de legionarias con que cuenta, incluyendo a Pon, una chica de 16 años nacida en Estados Unidos y de padres panameños.

De las cuatro, la única que inició de titular fue Vargas, quien jugó por el lateral izquierdo, jugando prácticamente todo el encuentro.

Para la segunda mitad, Quintana fue haciendo entrar, poco a poco al terreno de juego del coliseo que albergará las ceremonias de inauguración y clausura de los Juegos Olímpicos Tokio 2020, a las otras tres.

Schiandra González, quien ya vistió la camiseta nacional en un Premundial Sub-17 de Concacaf (en 2012), ingresó en el medio tiempo en reemplazo de Aldrith Quintero.

Diana Pon lo hizo a los 65 por la capitana Natalia Mills, mientras que Elidia González entró por Vargas cuando se jugaba tiempo de reposición.

Reacciones
Pero ¿qué se siente debutar en la selección y ante uno grande como Japón?

Cada una de estas cuatro jugadoras comentó cómo fue ese momento y qué pasaba por su mente.

Rosario Vargas, del Valencia CF B de España, argumenta que: «Mi primera convocatoria con la selección mayor femenina de Panamá y ser titular en mi debut, ha sido un sueño hecho realidad… en lo personal, el partido para mí comienza mucho antes que el árbitro dé el pitazo inicial, empezó desde la convocatoria».

Sobre el haber debutado ante Japón en un estadio como el Japan National Stadium, un coliseo que por su imponencia podría hacer temblar hasta el más profesional de los jugadores, Vargas sostuvo: «Qué mejor equipo contra el que jugar que un ‘top 10’ del ranking mundial de FIFA»

Schiandra, quien milita en el fútbol costarricense con el SUVA Sports, sostuvo que nada de esto ha sido producto de la suerte.

«Para mí es un orgullo y lo que se siente jugar con la selección no tiene precio… para mí fue una sensación muy especial porque hace mucho tiempo estuve esperando mi debut y gracias a Dios al fin llegó; ya me queda claro que nada es suerte, todo es disciplina, trabajo duro y esfuerzo».

Chiricana de nacimiento, Schiandra se sinceró al decir que: «Trabajaré aún más duro en todo lo que tenga que mejorar y pues me llevo una bonita experiencia.

Para la juvenil Diana Pon, jugadora del Prime FC de Estados Unidos, el poder jugar ante Japón fue una experiencia «maravillosa».

«Tenía sentimientos encontrados», asegura Diana. «Me sentí muy contenta, pero a la vez un poco nerviosa en esa espera por entrar al campo de juego; pero, una vez dentro, estaba ya muy concentrada y solo pensaba en dar lo mejor de mí y representar bien a Panamá y a todos aquellos que me ayudaron a llegar hasta aquí», puntualizó.

«Me sentí también muy orgullosa de mí misma», agrega «pues a mis 16 años pude debutar y competir con jugadoras de mucha trayectoria y recorrido a nivel mundial… fue una experiencia maravillosa que llevaré conmigo para siempre».

Diana se siente muy agradecida con el cuerpo técnico, «en especial con el profe ‘Nacho’ Quintana por creer en mí y darme esta oportunidad, así como con mis compañeras quienes me recibieron con los brazos abiertos».

Finalmente, Elidia González, quien milita con el AD Dimas Escazú de Costa Rica, aseguró sentirse muy feliz pues desde pequeña su sueño era jugar con la selección.

«Haber debutado con la selección nacional me llena de satisfacción pues todo el trabajo realizado ha dado resultado… al entrar a la cancha sentí un poco de nervios, no lo niego, pero con el correr de los minutos se pasa y lo que queda es sudar la camiseta hasta el final».

Vía: Fepafut