Una diana de Suárez fabricada por Messi pone en ventaja al Barcelona, que deberá emplearse a fondo dentro de una semana en Mestalla. Los azulgranas trabajaron el triunfo a conciencia, pero tuvieron muchas dificultades para superar el orden valencianista. Mucho mérito para un equipo lastrado por las ausencias y que al final tuvo incluso opciones de empate en los pies de Santi Mina.

El monólogo azulgrana fue el esperado. Las ausencias nobles del Valencia afectaban a todas las líneas, en las posiciones más sensibles. Dos centrales, el mediocentro defensivo y el futbolista más encarador. Además, Marcelino prescindió d eZaza y buscó la contra con dos puntas veloces, Vietto y Rodrigo. En la práctica ninguno aprovechó espacios ni aguantó el balón para la salida del equipo, lo que produjo una sensación de asfixia notable al equipo valencianista.

VÍA: MARCA