El Barcelona ganó 1-2 al Sevilla, se redimió de su derrota en la Liga de Campeones contra el City con una gran reacción en el segundo tiempo y asaltó el fortín del Sánchez Pizjuán, llevado por un gran Messi, donde también había ganado esta temporada el propio equipo catalán en la ida de la Supercopa de España (0-2).

En un partido disputado y vibrante, con un tiempo para cada equipo, el Sevilla fue muy superior en la primera mitad y se adelantó con un tanto de Vitolo en el primer cuarto de hora, pero Messi empató poco antes del descanso con su gol número 27 a los sevillistas, y en el segundo periodo Luis Suárez amarró el triunfo con el 1-2 para los barcelonistas, que incluso pudieron golear.

Con el Barcelona segundo y el Sevilla tercero a un solo punto, ambos llegaban a la cita con bajas, sobre todo los azulgrana y en especial en su defensa, al estar Mathieu, Piqué, Jordi Alba y Aleix Vidal lesionados, además de Iniesta. Al equipo andaluz le faltaban atrás los argentinos Nico Pareja, por lesión, y Mercado, sancionado.

Luis Enrique, técnico barcelonista, optó por Denis Suárez en el medio campo como escudero de otro exsevillista, el croata Iván Rakitic, y Busquets, y sacó toda la pólvora arriba con el tridente temible que forman Messi, Luis Suárez y Neymar ante un Sevilla que recuperó a su cerebro, el galo Samir Nasri, quien no quiso perderse el choque tras ser duda toda la semana por un problema muscular.

El partido tuvo un comienzo trepidante. El conjunto entrenado por el argentino Jorge Sampaoli salió con muchísima intensidad, con ambición y con una presión asfixiante que ahogó al Barcelona, que sufrió en demasía al no hallar el rumbo y pasó muchos problemas.

Redacción

AFP