Panamá tratará de golear este martes a Granada (8:30pm) para avanzar a la siguiente fase de la Copa Oro, aunque las esperanzas de los canaleros dependen también de que la invicta y ya clasificada Honduras derrote a Catar.

El duelo, a disputarse en el Exploria Stadium de Orlando, se presenta dramático para los panameños, que ven amenazado seriamente su pase a cuartos de final, fase a la que han llegado siempre desde la edición de 2005.

A falta de una fecha, Honduras encabeza el grupo D con seis puntos, seguido de Catar con cuatro, Panamá con uno y Granada con cero.

Para evitar la debacle, los dirigidos por el hispano danés, Thomas Christiansen, deben ganar con 5 goles de diferencia a Granada, que no se juega más que la honra.

Pero el esfuerzo será en vano si Catar logra una victoria o un empate ante Honduras, lo que clasificaría al equipo árabe en detrimento de los panameños.

En teoría, Catar tiene la ventaja de que Honduras, ya clasificado, podría enfrentar la cita más relajado o con jugadores menos habituales para darle descanso al teórico equipo titular.

«Queda un partido más, vamos a salir a ganar, hacerlo bien y esperar lo que pase», señaló Christiansen en conferencia de prensa

Por su parte, Granada cuenta sus partidos por goleadas y ya no tiene ninguna opción de seguir en el torneo.

Los dirigidos por el canadiense, Michael Findlay, perdieron 4-0 ante Honduras y Catar, por lo que la cita se presenta como una oportunidad de seguir creciendo ante un rival de Concacaf.

Los principales inconvenientes de Panamá se producen en defensa, donde Harold Cummings será baja por lesión, mientras que Roderick Miller es duda por molestias físicas, el principal talón de Aquiles ha sido el eje de la defensa, con sensibles bajas por lesión y covid-19.

El equipo ha encajado seis goles en dos partidos y las principales críticas se dirigen a la facilidad con la que los defensores pierden la posesión al salir con la pelota jugada desde atrás, lo que provoca letales contragolpes del rival.